Hay que arrojar la vista atrás, al 24 de febrero de 2020 para volver a empezar. Justo dos años para enterrarlos en el olvido, pero de nuevo hay un horizonte para la vela latina.
Hay que arrojar la vista atrás, al 24 de febrero de 2020 para volver a empezar. Justo dos años para enterrarlos en el olvido, pero de nuevo hay un horizonte para la vela latina.
El pasado sábado rellanaremos el VI Curset como si nada, como quien tiende la red una vez más por encima de un pozo oscuro del lago. Hemos pasado el tiempo unidos por WhatsApp, compartiendo alegrías y penas, nuevos limpios, Navidad, buenos deseos. Nos conocemos, somos los amigos de antaño. Y hicimos planes para sacar adelante nuestro proyecto, que más allá del aprendizaje queremos que nos lleve a ser parte activa en la recuperación de la Albufera.
El reencuentro en el desayuno tradicional dejó las cosas como si no hubieran existido dos años vacíos de vela y para algunos, incluso de Albufera. Alumnos, monitores y colaboradores recordaron cómo hacer la emparejada montando los barquitos en seco, aprovechando que el fuerte viento no nos tumbaría.
El tiempo no quiso acompañar, pero las ganas de seguir adelante estaban enteras. Luego llegó el momento de lanzarlos al agua y dejarlos amarrados hasta el próximo sábado, ¡esperando de nuevo poder ir a vela!